Karen Trivette.
Curadora

Hay un dicho, «No existe tal cosa como mala publicidad». Dice Gary Martin en The Phrase Finder, que el dicho «es la noción de que cualquier mención en los medios ayuda a la causa de una persona, incluso cuando le dan una mala imagen». Con frecuencia esta cita se le atribuye a Phineas T. Barnum, el presentador y dueño de circo estadounidense del siglo XIX. Se dice que Oscar Wilde declaró: «Lo único peor aparte de que se hable de uno, es que no se hable». Ya sea que uno esté de acuerdo o no con estas citas, la publicidad no puede haber preocupado mucho al modisto Oscar de la Renta; él recibió en lo personal una publicidad tan brillante como la de sus diseños de moda. Abundan los ejemplos de dicha cobertura de prensa, algunos de los cuales se destacan a continuación.

Aquí, en la Biblioteca del Fashion Institute of Technology-SUNY en la unidad de Colecciones Especiales y Archivos Universitarios (SPARC), somos muy afortunados de tener colecciones de archivos que destacan la relación muy especial y crítica entre la prensa o los medios de comunicación y la industria del diseño de modas. Colecciones de archivos notables de SPARC incluyen: la colección Nina Hyde (1914-1996); la colección Eleanor Lambert (1943-2003); la colección Ruth Finley, que contiene los Calendarios de Modas de 1945 hasta 2014 (1945-2016); la colección del Instituto del Vestir de Nueva York (1955-1970); y la colección Elsa Klensch (1985-1993). En estas colecciones de archivos uno descubre miles de interesantes historias sobre diseñadores de moda y los legados que crearon y que fueron documentados en la prensa. Las colecciones de archivos también son ricas como fuente principal, ya que contienen citas de primera mano de los propios personajes. Un diseñador muy importante que debe abordarse en todas estas colecciones de archivos, entre otros, es el señor Oscar de la Renta.

Elsa Klensch es mejor conocida por su trabajo en la Red de Noticias por Cable o CNN. Ella fue anfitriona y produjo el programa de CNN, Estilo con Elsa Klensch, desde 1980 hasta 2001. En la colección de archivos de Klensch, SPARC tiene las transcripciones de muchas entrevistas con diseñadores de moda que nunca fueron transmitidas. Oscar de la Renta fue entrevistado por Klensch en la primavera y el otoño de 1989. En las entrevistas, Klensch señala el enfoque sencillo y aireado de los diseños del señor De la Renta. Él contribuyó a la entrevista diciendo que la colección de noche era especialmente importante; dijo «la ropa de noche soy yo… es lo que siempre he hecho». Klensch también describe los diseños como fluidos y plenos de movimiento y suavidad. El señor De la Renta señala que trata de lograr una apariencia femenina pero que sea clásica, sutil y sencilla. Dijo: «algunos diseñadores confunden la simplicidad con el aburrimiento». Él nunca lo hizo.

El señor De la Renta fue un creador consistente. Ya en 1971 los adjetivos tales como suave y fluido se asignan a la estética de Oscar de la Renta, eso dice Eleanor Lambert. Lambert fue la potencia de la prensa y el agente de publicidad para muchos diseñadores de moda estadounidenses, durante muchas décadas de creatividad. Ella también ayudó a establecer el Instituto del Vestuario del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York en 1937, al igual que el Instituto del Vestido de Nueva York en 1939, siendo su directora hasta 1962.

El señor De la Renta aparece extensamente en la colección de archivos de Lambert, que suma aproximadamente sesenta pies lineales de material. El material más antiguo sobre De la Renta es de 1969, mientras que el más reciente es de 1998 –cerca de 30 años de cobertura. En la colección los investigadores pueden encontrar numerosas fotografías y negativos originales que muestran al señor De la Renta, así como a sus estupendos diseños. Hay también muchos comunicados de prensa y para casi todos los años de la representación de Lambert sobre él incluye ensayos biográficos actualizados. Hay, además, una gran cantidad de correspondencia, algunas de ellas con editores de moda de todo el mundo, con el señor De la Renta sobre estrategias de prensa, y de estudiantes de mercadotecnia de moda y programas de diseño de moda de todo Estados Unidos, que solicitan información sobre De la Renta para proyectos escolares.

También en la colección de archivos de Lambert hay miles de recortes de prensa y páginas sacadas de innumerables publicaciones. Un artículo en particular, de recortes de Fresno Bee del 20 de septiembre de 1981 y escrito por Jeanne Maglaty, expresa que la imagen de las creaciones del señor De la Renta «está destinada a personificar la elegancia, la sofisticación y el romance». Continúa diciendo que el señor De la Renta «sabe qué hace bella a una mujer». Dice él: «Sé qué clase de ropa ellas (las mujeres) desean, cuáles son sus necesidades». Esto, dice Maglaty, con seguridad le ayuda a crear sus diseños – diseños que ella describe como «opulentos, románticos, femeninos, extravagantes y suntuosos». Lambert resume bellamente la estética de Oscar de la Renta: «Oscar de la Renta es el diseñador estadounidense mayormente identificado con unir ropa hermosa y mujeres glamorosas en elegante armonía». Dice ella que su enfoque es siempre de una “simplicidad refinada”.

Nina Hyde fue la editora de modas del Washington Post en el periodo 1972-1990. En su colección de archivos, hay una gran cantidad de hermosas fotografías de retratos del señor De la Renta, así como muchos recortes de otras fuentes que formaron parte de la investigación de Hyde. De especial interés es una obra titulada «Oscar Goes Global», por Melissa Sones, de abril de 1991. En su artículo, Sones revela el deseo del señor De la Renta de que la industria de la moda fuera más allá de Europa en cuanto a los conceptos de diseño e inspiración, justo cuando estaba por presentar su primer desfile de moda en París. Vio que la globalización estaba cobrando impulso y dijo que «la moda se está convirtiendo en un mercado mundial. También dijo: ««Soy un diseñador internacional… No reconozco las nacionalidades de las mujeres por sus guardarropas. Hoy, la gente —la ropa— es internacional. Las fronteras son inexistentes». Continuó diciendo: «Me molesta que todo lo importante que sucede [en la moda] siempre tenga que ser europeo, y no algunas veces estadounidense. ¿Por qué la moda estadounidense no puede ser internacional como cualquier otra moda?»

También en la colección de archivos de Hyde, en una nota de prensa del 19 de mayo de 1976, la columnista y escritora de moda Eugenia Sheppard para «Inside Fashion» escribe, en relación con la ropa para uso diario: «el mensaje de Oscar es: aléjese de todo y viva confortablemente y con color». Una vez más, el movimiento es un elemento importante en la estética del diseño del señor De la Renta, ya que uno no se puede mover con libertad si no está cómodo. En cuanto a sus diseños para la noche: “«Oscar siempre ha sabido manejar el chiffon», escribió Sheppard.

La prensa fue tan amable con el señor De la Renta como él con su clientela. Pero su generosidad no terminaba con sus clientes, también se daba mucho a la humanidad y la prensa destacaba ampliamente esta parte de su personalidad. En la colección de archivos de Hyde, hay muchos de estos artículos, algunos enfocados en su herencia hispana, su filantropía y su devoción a su país natal, la República Dominicana. Un artículo escrito por Sarah Booth Conroy para el Washington Post reconocía al señor De la Renta como un héroe hispano y como un héroe de alta costura. En una ocasión, él destacó a otros seis diseñadores hispanos y recaudó cerca de 30,000 dólares para dividirlos entre la Conferencia Nacional de Mujeres Puertorriqueñas, la Asociación Nacional de Mujeres Mexicanoamericanas y la Asociación Nacional de Mujeres Cubanas Americanas. Conroy escribió: «Esta vena de sentimientos y su sensibilidad hacia las mujeres, que tal vez empezó con sus seis hermanas, pueden ayudar a explicar su negocio multimillonario».

También de la colección de archivos de Hyde, Sones afirma que cuando se le pedía que explicara su enfoque increíblemente sensible sobre el éxito, el señor De la Renta respondía inequívocamente: «Tengo una idea mucho mejor a lo interno de lo que la cliente quiere usar». Todo parece sugerir que tenía toda la razón.